"Jamlet de Villa Elvira". Sí, leyó bien. Cuando Blas Arrese Igor presentó el texto de Hamlet al grupo de teatro que dirige en Villa Elvira, en La Plata, la mayoría lo escribió con jota. Para el dramaturgo vio este gesto, supo que los alumnos se habían apropiado de Hamlet, en un acto de "resignificación y desafío a las normas de la ortografía correcta".

El proyecto surgió en el 2017, cuando Blas volvió a la facultad de Periodismo y Comunicación Social, que no pisaba desde el '98, "asqueado" por lo que consideraba lo académico. Allí, el dramaturgo tuvo el impulso de cruzar dos campos: la comunicación y el arte, y trabajar la dramaturgia desde el campo popular y de la recepción que tienen de este género el grupo de chicos del barrio platense ante el clásico de William Shakespeare.

"Me pareció que era bueno tomar ese texto y hacerlo detonar a partir de la poética de los pibes y las pibas de ese barrio. Estuvimos trabajando, leyendo, hablando sobre el Hamlet, y, de manera muy consciente, destruyéndolo, para construir una versión propia", explicó.