Paola Ruggero, presidenta de la asociación civil de Cannabis Medicinal de la provincia La Pampa (CannaPam), puso de manifiesto el “poca voluntad de avance” por parte del Gobierno y del municipio de Santa Rosa respecto al registro de usuarios de cannabis medicinal.

Además, se refirió al anuncio del presidente Alberto Fernández quien dijo que el Gobierno promoverá un proyecto de “utilización del cultivo de cannabis con fines de industrialización para uso medicinal e industrial”.

“Que se utilice la palabra cannabis siempre es un avance, pero hoy sólo hablar de industria no es lo que mejor nos cayó a las asociaciones y cultivadores. Entendemos el contexto, pero vemos que siempre se está priorizando la industrializacion y no la salud”, sostuvo. “Eso nos hace un ruido importante”, agregó.

“Lo bueno de este anuncio es que nosotros como colectivo, en lugar de pedir tanto cómo hay hacer las cosas, debemos pedir que el Estado nos cuide y nos garantice que nuestros derechos los podemos concretar con su respaldo y garantía. Eso es lo que yo pretendo que el Estado presente”, aseguró. Y amplió: “Porque seguimos siendo perseguidos por el autocultivo. Pedimos estar en un marco legal para no ser perseguidos. El doble discurso es peligroso”.

Respecto al avance en el autocultivo y el registro en Santa Rosa dijo que sigue “en la nada”.

“Nosotros hemos luchado para llegar a este escalón pero tanto el Gobierno como el municipio no dan voluntad de avance para saber qué cantidad de gente utiliza cannabis. Es necesario un marco legal, una trazabilidad y no lo están haciendo”, dijo finalmente.

CannaPam es una asociación civil autogestiva, sin fines de lucro, que surge desde la necesidad de un colectivo de usuaries medicinales, madres, padres, cultivadores solidaries y profesionales de la salud, unidos por las bondades de la planta cannabis sativa.