"Tengo la sensación de que en algún momento me cruzo con el bicho. Abro la puerta y quizás está ahí mirándome", dijo el gran capitán de Relatores, quien envió un mensaje sobre el duro momento que atraviesa luego de haberse contagiado de coronavirus.

A través del portal web de relatores.com.ar Víctor Hugo Morales, envió un mensaje desde su convalecencia obligada -hace casi un mes-, luego de haber contraído el coronavirus covid-19.

En palabras a M24 de Montevideo, Uruguay, Víctor Hugo señaló tajantemente: "Es muy duro, pero hay que dar la pelea por vivir", en referencia al covid-19. "Alguna aclaración sobre cómo me estoy sintiendo y por qué esta ausencia de estos días", comenzó explicando, y añadió: "Para que sepan dónde estoy parado, reflexionar un poco juntos sobre este tiempo aciago, que me tiene condicionado -con el covid-19- en una clínica, pasándolo aceptablemente ahora. Pero a la salida de una neumonía, que no es de las peores, pero ha sido grave. Y que me tiene hace más de veinte días encerrado, sin sufrimientos especiales -como por ejemplo estar intubado, estar anestesiado-, pero con una gran insuficiencia de rendimiento físico, hasta para la modestia de ir al baño".

"Es un enemigo invisible al que no se puede tocar, y del que solamente uno se puede esconder hasta que se vacune. Yo no llegué a tiempo a la vacuna, tuve mala suerte, me faltaban pocos días. Todo un año cuidándome hasta que algo falló, en la última instancia, y me atacó: ¡covid-19 con neumonía!".

"La neumonía es una infección a los pulmones, ya lo saben; puede ser muy grave, mortal, que uno combate de distinta manera. A mi me dieron plasma; ahora me están dando corticoides, que intuyo es lo que mejor me ha pasado desde hace cinco días. Y ahí se marcó una pequeña recuperación".

"Puedo hablar en este tono. Me piden que no abuse porque uno se cansa. Además, hoy me bajaron un poco el suministro de oxígeno, que es fundamental. En consecuencia, estoy un poquito más debilitado".

No pudo domar a su animal periodístico y comenzó a explayarse sobre la realidad del país y la región. Reflexionó entonces que "en Argentina, una cosa que sucedió, es que se relajaron los controles. En todos los niveles. Yo mismo, empecé yendo -de vez en cuando- al canal, después un poco más. No fue en el canal donde me contagié, creo. Pero me permití alguna salida; el protocolo, todo eso, y cuando quise acordarme, estaba metido en un baile que ha dificultado bastante en un sentido".

"A mi me da la sensación que estas cepas, que aparecen a cada rato, por todos lados, configuran una amenaza que no se detiene, una amenaza muy persistente, odiosamente plantada en la vereda de nuestra casa. Abrimos la puerta, ¡están ellos!".

"Me pregunto, por ejemplo, ¿Cómo me voy a esconder? Yo tengo que volver, si me recupero, y retomar actividades. Trabajaré desde mi casa como hice durante un año para la televisión. ¡veré!", dijo, imaginando los próximos meses.