La violencia criminal no cesa en Rosario en el marco del Gobierno de Maximiliano Pullaro.
Los ataques casi simultáneos a tres colectivos, una amenaza en un cuarto, otra en un supermercado, y balas servidas en la puerta de una escuela paralizaron el transporte de pasajeros, sumió a Rosario en un temor renovado y reactivó las deliberaciones en el gobierno. Hasta el Papa Francisco dedicó desde Roma un mensaje a la coyuntura rosarina.
Diego Frisco, colega de Radio Nacional Rosario, expresó en tal sentido: “El lunes a la mañana aparece arriba de un colectivo una nota amenazante, nadie sabía cómo llegó esa nota, por lo tanto, los colectiveros pararon”, agregó “simultáneamente, se empieza a conocer que el domingo a la madrugada pasó un auto por los barrios cerrados más caros de Rosario, haciendo unos tiros al aire y dejando una nota amenazante a la familia de Di María”. “Tuvimos aproximadamente 10 días de tregua y comenzó a complicarse nuevamente la situación” finalizó.