Mariano Israelit, amigo de Diego Maradona desde 1982, presenta “El amigo de Dios”, un libro que reúne varias de sus historias junto al futbolista, el próximo lunes 25 de noviembre en la Biblioteca Nacional.

En diálogo con Adrián Noriega en “Nunca es tarde”, Israelit recordó: “yo iba a la escuela con Hugo, uno de los hermanos de Diego, y de tanto ir a estudiar a su casa nos hicimos amigos; cuando él se va a Europa los encuentros eran en cada cumpleaños familiar porque yo ya era muy amigo de la familia y él siempre volaba desde Nápoles para estar en esas fiestas con los suyos”.

“En esa época yo había entrado a trabajar en la producción del programa de televisión de Juan Alberto Badía y le empecé a insistir para que venga al programa porque era algo que me podía ayudar a crecer ahí, le insistí y le pedí por favor hasta que logré que venga un sábado un rato antes de tomarse el avión para volver a Italia”, agregó.

“Para 1987, Diego viaja de nuevo a Buenos Aires para venir a buscar a Claudia (Villafañe, por entonces su pareja) y a Dalma (su primogénita), que había nacido acá, y sabiendo que él venía le volví a insistir para que venga a la televisión y me volvió a hacer ese favor, y esas terminaron siendo las dos oportunidades en las que Maradona estuvo en el programa de Badía”, indicó.

Israelit enfatizó: “siempre voy a agradecerle a Diego lo que hizo con mi vida, que fue alegrarme a través del fútbol, me dio mucha pena que muera en esa soledad un ídolo tan grande de la Argentina, aunque también sé que era alguien muy difícil de cuidar”.

En ese sentido, añadió que “Diego cuando jugaba a la pelota era un genio y afuera de la cancha era muy querible y podía tener actitudes de mucha generosidad y de mucha amplitud, pero también era un tipo muy bravo cuando algo no le gustaba”.

“El amigo de Dios” se presentará el próximo lunes en la sala Cortázar de la Biblioteca Nacional en una charla con Mariano Israelit de la que también participará Guillermo Cóppola, autor del prólogo.