AUDITORIO DE RADIO NACIONAL

Herrera, el piano y el folklore por el Día de la Música en Radio Nacional

La pianista, compositora y maestra Hilda Herrera fue homenajeada el viernes en un colmado Auditorio de Radio Nacional donde, a partir del Día Internacional de la Música, se subrayó su labor como mentora de Creadores e Intérpretes de la Música Argentina en Piano (Cimap) y su notable trayectoria artística.

Nacida hace 92 años en Capilla del Monte, Herrera fue protagonista de una exquisita velada conducida por el periodista Mariano del Mazo (además responsable del espacio “Flores Negras” que se emite de lunes a viernes de 17 a 20 a través de la AM 870) y que incluyó interpretaciones a cargo de la propia tributada y de Nicolás Müller, Sebastián Gangi, Lisandro Baum, miembros del equipo docente del Cimap.

“Estoy muy agradecida de este homenaje que no esperaba por parte de esta casa que apoyó por tantos años al Cimap. He sostenido una carrera muy difícil por una especie de desafío que no buscó la fama sino creer que el piano podía ser otro vehículo para mostrar la enorme riqueza de la música nuestra”, señaló Hilda en un tramo de la charla con Del Mazo.

Además de promover el Cimap desde hace 22 años, en los '90 compartió con el guitarrista Juan Falú el ciclo "Maestros del Alma" que permitió reconocer en vida a grandes figuras de la cultura popular como Gustavo "Cuchi" Leguizamón, Horacio Salgán y Rolando "Chivo" Valladares, entre más.

 

Como solista, además, publicó los álbumes "Señales luminosas" (1997), "Yupanqui en piano" (2000), "La diablera" (2005), "Gardel" (2010) y, este año, “La iluminada”, registrado por un sello francés.

Entre las obras de la creadora que el año pasado fue distinguida en el marco de la 20° edición del Encuentro nacional de música popular con sede en Rosario, destacan las compuestas junto a Antonio Nella Castro ("La diablera", "Zamba del chaguanco" y "Navidad 2000"), Margarita Durán ("Zamba del fiero" y "Amanece despacito") y Kiko Herrera ("La huesuda", "De tinajas" y “A don Argentino”), por citar solamente algunas.

 

 

En el repaso por esa dedicada vida musical, evocó: “Con los Hermanos Ábalos tuve la primera señal de lo que se podía hacer con el piano en el folclore. Y Adolfo (pianista en aquel quinteto iniciado en 1939) fue el motor para mí” e inmediatamente sostuvo: “Mi entrada al folklore fue por la música del noroeste, esa cosa rítmica. Yo quería tocar la zamba ‘Nostalgias santiagueñas’ y me sentaba al piano y no podía, pero gracias a mi marido que era santiagueño y tocaba el bombo, encontré el ritmo que me faltaba en la mano izquierda, porque lo más importante de cualquier música popular es el ritmo”.

A la hora de la música, el catamarqueño Müller hizo su zamba “La mocha”; Gangi ejecutó “Chacarera trunca”, de Adolfo Ábalos; y Baum asumió el triunfo “La Vuelta de Obligado”, de Miguel Brascó y Alberto Merlo, interpretaciones que intercalaron el diálogo y que sirvieron para dar cuenta de otro orgullo de la maestra: “Los tres tocan diferente y esa es la idea, que cada quien tenga su sonido, su personalidad y su horizonte”, sentenció.

 

Desde esa mirada y antes de ella misma cruzar la sala para despedirse tocando la zamba “El llanto del crespín” (que urdió junto a Nella Castro) y su cueca cuyana “A Mendoza”, Herrera apuntó ante aplausos y vítores: “Ante el ruido ensordecedor de lo que escuchamos habitualmente y que para mí no es música sino que es igual en todo el mundo, digo que hay que proteger la música propia”.

El CIMAP es un programa de la Secretaría de Cultura de la Nación, a cargo de Leonardo Cifelli, dirigido por Hilda Herrera e integrado por un equipo docente de destacados instrumentistas especializados en el repertorio argentino. Durante todo el año se dictan clases taller de interpretación, composición y arreglos de folklore y tango, y entre sus actividades anuales se incluye la realización de nueve conciertos en la sala Ástor Piazzolla del Centro Cultural Borges, con participación de alumnos y profesores.

FOTOS: Florencia Downes.