Con el uso de nuevas tecnologías de pago, el transporte público en la Ciudad de Buenos Aires atraviesa una transformación histórica que promete mejorar la experiencia diaria de millones de pasajeros.

En este marco, los usuarios del subte porteño podrán elegir -a partir de hoy, lunes 3 de diciembre- la posibilidad de utilizar distintos métodos de pago, que se suman a la tradicional tarjeta SUBE. Este avance tiene como objetivo simplificar los viajes, reducir los tiempos de espera y fomentar la inclusión financiera.

A la espera del QR

Si bien inicialmente el anuncio incluía la posibilidad de abonar con código QR, esto quedará para más adelante, a la espera de que el Banco Central ponga en marcha un nuevo estándar que permitirá el uso de pagos QR en todas las billeteras digitales.

Estos son los detalles claves que los usuarios deben conocer para aprovechar el nuevo sistema.

En lo que respecta al código QR, el Banco Central pondrá en marcha un nuevo estándar que permitirá el uso de este sistema en todas las billeteras digitales. En el futuro también se implementará para colectivos y trenes.

Este QR será diferente al que se utiliza en los comercios, ya que no requerirá contar con conexión a Internet y funcionará más rápido, sin la demora del escaneo.

Confían en que su implementación se concretará en las próximas semanas.

Un dato que los usuarios deberán tener en cuenta es que a pesar de que en los molinetes ya figura la posibilidad de pagar con QR, este sistema todavía no podrá ser utilizado.

¿Cómo será el pago con tarjeta?

Principalmente, es necesario señalar que no será necesario realizar ningún trámite previo para empezar a pagar con tarjeta o celular, tampoco será imprescindible que el celular esté conectado a Internet, ya que el sistema funciona offline.

Además, con la misma tarjeta, se podrán abonar hasta 10 viajes en un mismo día y hasta 4 viajes en una misma hora.

La forma más sencilla es pagar con tarjetas de crédito, débito o prepaga contactless, sea Visa o MasterCard sin importar el banco o la billetera virtual.

Para ello, se deberá acercar la tarjeta al lector del molinete y el sistema descontará automáticamente el valor del pasaje de la cuenta bancaria o en el resumen de la tarjeta de crédito, sin necesidad de recargar saldo previamente, lo que elimina la espera y agiliza el acceso al subte.

Por su parte, en el caso de los teléfonos con tecnología NFC (disponible en Android), los usuarios que opten por este sistema solo deberán acercar el dispositivo al lector del molinete para que el pago se realice automáticamente, sin necesidad de conexión a Internet.

Quienes prefieran continuar con el sistema tradicional, podrán seguir utilizando la tarjeta SUBE, que mantendrá los beneficios de tarifas subsidiadas, como la tarifa social o el boleto estudiantil, que son esenciales para los sectores más vulnerables.

En busca de la inclusión financiera

En este contexto, la Asociación de Bancos de las Argentina (ABA) -que nuclea a las entidades internacionales- y la Asociación de Bancos de la Argentina de capitales nacionales -Adeba- celebraron la implementación del nuevo sistema, destacando su potencial para fomentar la competencia, reducir los costos y facilitar la inclusión financiera, especialmente para quienes no tienen acceso a los servicios bancarios tradicionales.

Ambas entidades, a través de un comunicado conjunto- indicaron que estos cambios no solo harán más sencillo el uso del transporte público, sino también permitirá a los turistas abonar de manera directa sus pasajes.

Las promociones de los bancos

Complementariamente, las entidades bancarias lanzaron promociones para incentivar el uso de estas nuevas opciones de pago.

Los usuarios que paguen sus pasajes con tarjetas Visa a través de la modalidad contactless de la aplicación MODO podrán acceder a un reintegro del 65%, este beneficio es válido todos los días de la semana y tiene un tope de reintegro de $8.000 por tarjeta por semana.

Entre las entidades bancarias se encuentran Banco Galicia, BBVA, Santander, Macro, ICBC, Credicoop, Ciudad, Hipotecario, Patagonia, Supervielle y Brubank, entre otros.

Para asegurar el beneficio, los usuarios deberán vincular bajar la app de MODO o la del banco correspondiente y asociarla para pagos sin contacto (contactless), el reintegro se reflejará en la cuenta bancaria asociada a la tarjeta dentro de un plazo máximo de 30 días posteriores a la compra.

Por su parte, Mastercard ofrece durante diciembre y enero un 50% de descuento en pagos con tarjeta de crédito o prepaga contactless, con un tope de reintegro de $400 por transacción y un límite mensual de $12.000.

Además, Mastercard otorgará un 60% de descuento en pagos con débito o celular, con un tope de reintegro de $500 por transacción y $15.000 mensuales.

En lo que respecta a los bancos, tanto el Nación como el Ciudad anunciaron que los usuarios de ambas entidades que utilicen sus medios de pagos tendrán reintegros de hasta el 100% en el precio de los pasajes.

Desde el Banco Ciudad, destacaron que la promoción del 100% de reintegro estará disponible desde el lunes 3 de diciembre hasta el 31 de enero de 2025, con un tope máximo de reintegro semanal de $12.000, que dependerá del medio de pago.

Los reintegros se aplicarán en la cuenta bancaria para quienes paguen con débito, y en el resumen del mes siguiente para quienes abonen con crédito.

Ualá también se suma a las promociones, ofreciendo descuentos de hasta el 65% y reintegros de hasta el 70%, respectivamente.

Descuentos y tarifas

En cuanto a los descuentos para pasajeros frecuentes, el gobierno porteño precisó que con los nuevos medios de pago, se aplicará la tarifa escalonada: descuentos del 20%, 30% y 40% a partir de los 20, 30 y 40 viajes, respectivamente, siempre que se utilice la misma tarjeta o forma de pago (digital o física).

La tarifa del subte es actualmente de $757, a partir del viaje 21 dentro del mismo mes, baja a $605; desde el 31 a $529 y, si se realizan 41 viajes o más, el costo será de $454.

Según el gobierno porteño, más de 12 millones de personas se beneficiarán con este cambio, que busca hacer del transporte público un servicio más práctico y accesible.