El jefe de prensa de Metrogas Hernán Chiesa en diálogo con el equipo de Ramos Generales, aclaró ciertos puntos a tener en cuenta a la hora de prevenir accidentes por la intoxicación de monóxido de carbono.

"Hay que ser consecuente en revisar los artefactos. El monóxido no tiene olor, color ni sabor, por eso es peligroso porque no da aviso. Ataca cuando uno está desprevenido, muchas veces cuando las personas descansan o están relajadas", mencionó.

La recomendación principal es que "se revisen los artefactos y los conductos de ventilación". "Quizás lo que funcionaba el año pasado no lo hacía el pasado. También es importante que la llama sea color azul", agregó.

Además en Ramos Generales entrevistaron a Pablo Barbero, ingeniero de Intelligent Gas, una empresa que fabrica desde hace 27 años detectores de monóxido. "El monóxido de carbono es lo que queda cuando en una llama no entró el suficiente oxigeno. Es importante que no se obstruyan las rejas de ventilación", explicó.