El parador Santos valló una importante zona de la Playa Arazaty y con seguridad privada prohíbe el paso y hasta sacar fotos o filmar el lugar. El sábado hubo una nueva movilización para frenar la privatización de playas y costas en la ciudad de Corrientes.
En diálogo con Camilo Gómez Montero, destacó en la Ronda Federal que pese a las distintas legislaciones nacionales, provinciales y municipales que prohíben esta acción, Eduardo Tassano como intendente y los empresarios cómplices las realizan de todas formas. "Acá existe una impunidad impresionante".
Con el aval de la Municipalidad de Corrientes, continúa la privatización de las playas y costanera de la Capital provincial. El sábado hubo una nueva movilización convocada por las y los Defensores de los Espacios Públicos Costeros.
Santos, uno de los paradores construidos en plena playa Arazaty, montó unas vallas que rodean el extenso terreno que acaparó en un lugar otrora público, y de libre acceso y tránsito para toda la ciudadanía de Corrientes.
El parador, que funciona como bar y boliche, también contrató seguridad privada que vigila que nadie ingrese a la zona. Ni siquiera se puede sacar fotos o filmar el parador. No obstante ello, se viralizaron por redes sociales imágenes sobre la fiesta privada que tuvo lugar en el transformado boliche el viernes por la noche.