El gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, cuestionó las acciones de espionaje que se conocieron en los últimos días, luego de que la actual administración de la Dirección de Migraciones denunciara ante la justicia el funcionamiento durante el macrismo de un seguimiento ilegal de 58.169 personas. Era un sistema para la "realización de inteligencia prohibida", se indica. Entre los funcionarios entrerrianos espiados aparecen también Laura Stratta, vicegobernadora actual; Rosario Romero, actual ministra de Gobierno y Justicia, entre otros.
Bordet, manifestó este miércoles su repudio ante la denuncia por espionaje ilegal durante el gobierno de Mauricio Macri y anunció que se constituirá como querellante en la causa que inició la gestión actual de la Dirección de Migraciones, tras aparecer su nombre en una lista de espiados.
"Es una situación lamentable que se tengan que inmiscuir en la vida privada de las personas. Una cosa son los actos públicos, que todos tenemos la obligación de explicarle a la sociedad. Pero los actos privados de las personas no pueden ser espiados por el gobierno para después dar carpetazos, producir noticias sensacionalistas, para socavar políticamente a cualquier persona, sea político, artista, deportista. Esto no puede ocurrir", argumentó el mandatario.
Seguidamente, el primer mandatario entrerriano, aseveró que se trata de un “hecho muy grave y estoy evaluando, con los antecedentes de la causa, constituirme como querellante porque no puedo permanecer de manera pasiva frente a un hecho que me afecta no sólo a mí como gobernador, sino a mi gabinete, el poder judicial y muchas personas que regularmente cada vez que salían del país se les informaba a una persona, que estamos averiguando también los nombres de ellos, porque tienen responsabilidad".
Por último, el gobernador entrerriano remarcó que “es un hecho aberrante, espantoso, que nos remite a épocas oscuras" y añadió: “Realmente es repudiable desde todo punto de vista, por eso estamos para presentarnos como querellantes”.
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