La pediatra Romina Ferreyra, vicepresidenta de la Sociedad Argentina de Pediatría Filial Río Paraná, habló sobre la parasitosis intestinal, contó cuáles son algunos posibles síntomas y destacó la higiene como prevención.

La médica pediatra Ferreyra visitó este miércoles los estudios de LT14, donde habló sobre la problemática parasitosis intestinal, muy difícil de detectar y con síntomas que en muchas ocasiones no se dejan ver. Recordó que los parásitos son seres vivos que viven a expensas de otros seres vivos y estos infectan al ser humano o a los animales domésticos que comparten el domicilio y dicho bicho se instalan en los intestinos.

Si bien hay muchos parásitos, existen dos grandes grupos donde se ubican los protozoos y los helmintos. Para cada uno de ellos hay un tratamiento específico, y por esto es tan importante que el paciente infantil concurra a la consulta cada seis meses, cuando es mayor de dos años.

Uno de los síntomas es que el paciente no crece adecuadamente, que no aumenta bien de peso y de talla, sin embargo en ocasiones al paciente le alcanza con lo que se alimenta y le tema del peso queda fuera. “Una de las características de la parasitosis es la anemia”, dijo y recordó que otro de los síntomas son la picazón, el prurito en la zona anal y genital, también la nariz, y el bruxismo (rechinar de los dientes).

Otros de los síntomas son los bronco espasmos o las bronquitis a repetición. Problemas en la piel que son a repetición y en muchas oportunidades se los trata como alergias. En cuanto al tratamiento, la especialista indicó que es necesario concretarlo luego de indicar el análisis de laboratorio y conocer el resultado, que muchas veces da negativo pero se trata igual, teniendo en cuenta los síntomas del paciente.

Por último, expresó que la prevención básica es la higiene, y el lavado de manos y de uñas es esencial para prevenir los parásitos.