Griselda Blanco era periodista y fue encontrada muerta en su casa de Curuzú Cuatía, Corrientes. Sus familiares comunicaron que se trataría de un asesinato relacionado con sus investigaciones periodísticas. Blanco venía recibiendo amenazas a raíz de sus denuncias sobre abusos en la Policía y delitos graves en el hospital público de Curuzú Cuatiá.

La Doctora Silvia Casarrubia, la abogada que se encontraba en permanente contacto con Griselda Blanco, contó que recientemente la periodista había recibido una carta documento del comisario del lugar y que permanentemente era amenazada y amedrentada por los informes periodísticos que realizaba.

"Los hijos de Griselda Blanco me dijeron que ella les había dejado mi teléfono 'por si le pasaba algo'", contó la abogada Silvia Casarrubia, quien insiste en que no se abandone la investigación sobre las amenazas que recibía la periodista asesinada. "La fiscal aplicó el Protocolo de Minnesota que se aplica en casos de muertes dudosas y pidió la intervención a las Fuerzas Federales para la investigación", dijo Casarrubia.

Área de Géneros de Radio Nacional