El secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar San Isidro, Mariano Cuenca, denunció 60 despidos y un lock out patronal.

El gremialista señaló que la empresa decidió cerrar sus puertas a pesar de que el Ministerio de Trabajo de Salta había dictado la conciliación obligatoria y anticipó que las medidas de fuerza por parte de los trabajadores continuarán la semana que viene, de no haber marcha a tras con las cesantías.

Por último, Cuenca dijo que los despidos no solo dañan a sus propias familias, sino también “a toda una región que depende del salario de los trabajadores”: