Mas de treinta personas, entre las cuáles había siete niños, fueron detectadas en un campo de cultivos de arándanos en la localidad de Santa Teresa, ubicada a 60 km al sur de Rosario, trabajando en forma precaria y en violación a las leyes que protegen los derechos de los menores de edad.

Fernando Muruaga, subsecretario de Fiscalización de trabajo, perteneciente al Ministerio de Trabajo de la provincia, confirmó que además del acta de infracción por las condiciones laborales, se inició una demanda penal por el trabajo infantil.