El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se refirió esta mañana a los incidentes que se produjeron el miércoles 12 de marzo en la marcha por los jubilados, que terminó con severos incidentes y destrozos en las inmediaciones del Congreso de la Nación.

En Pan Casero Nacional, afirmó que "hay una investigación que está llevando adelante la ministra de Seguridad, hizo unas denuncias y hay que esperar que la Justicia se expida".

"Hubo instigadores, no fue una marcha común, distintos grupos estaban predispuestos a generar hechos de violencia y el accionar de la fuerzas de seguridad fue conforme a lo establecido y al protocolo que tienen fijado".

En ese sentido, Francos vinculó los disturbios con intentos de desestabilización del Gobierno.

"No es la primera vez que se utilizan estos hechos para intentar debilitar o voltear un gobierno, como ha pasado otras veces", remarcó.

El funcionario defendió el accionar de las fuerzas de seguridad y, en la previa de la movilización prevista para el próximo miércoles, advirtió que "el Gobierno va a seguir cuidando el orden público mediante las fuerzas de seguridad".

"Todo lo que se deba hacer para evitar la violencia en estas manifestaciones, van a ser reprimidas por la ley y las fuerzas del Estado. El Gobierno está preparado para responder a estos hechos y lo va a hacer", subrayó.

En ese contexto, cuestionó a Karina Andrade, la jueza que liberó rápidamente a los detenidos por los incidentes que se produjeron el pasado miércoles y señaló: "La jueza incumplió con las normas que tendría que haber cumplido. Nos parece que es absolutamente improcedente".

Durante el programa Nunca es Tarde  de Adrián Noriega, el periodista entrevistó al especialista en Seguridad Daniel Adler, quien coincidió  con las palabras del jefe de Gabinete Guillermo Francos, y dijo: "Estamos ante un hecho de gravedad superior, esto parece muy orquestado y tiene un fuerte olor a un golpe de Estado. Todavía no se dimensiona el poder que va a tener esto el miércoles 19, en el que habrá la participación de actores municipales, estatales, incluso poderío económico porque se paga 50 mil pesos por  partipante. Se trata de criminales que se camuflan como un equipo de fútbol y son agitadores sociales, o criminales".