MAMÁ DE CHIARA NEUQUÉN

“Lo fundamental es luchar contra la violencia no el color del pañuelo"

Verónica Camargo, la madre de Chiara Páez, joven víctima de un femicida que diera lugar al nacimiento del Ni Una Menos, lamentó que pese a lo hecho y los avances todavía se repitan femicidios y hechos de violencia contra las mujeres.

En diálogo con Radio Nacional Neuquén, Camargo se preocupó por recomendar estar en alerta para que no se repitan hechos similares. “Algo siempre tenemos que hacer porque lamentablemente no bajan los indices y las estadísticas. Hay que hacer un cambio cultural, en la educación y ni hablar en la justicia. Se alcanzaron muchísimas cosas, pero falta un poco más. Ante cualquier señal de alerta o al ver una situación de vulnerabilidad hay que ayudar” recomendó.

El 10 de mayo del 2015 Chiara Páez tenía 14 años recién cumplidos, Manuel Mansilla 16. Ella recién había confirmado que estaba embarazada. Luego de visitar a su novio despareció. Finalmente se encontraron sus restos enterrados en el patio de la casa del joven. El Juez Javier Prado determinó que el Manuel Mansilla “mató a golpes a Páez despreciando su condición de mujer y conociendo su embarazo” y agregó que “no mostró un sincero arrepentimiento”.

En diciembre de 2021, la Suprema Corte de Santa Fe anuló el fallo. Además, la Corte ordenó que se lo juzgue nuevamente por un Tribunal de Justicia de Menores bajo la carátula “tentativa de homicidio”, con una condena potencial de 10 a 15 años. Finalmente, así se redujo la pena de 21 a 15 años de prisión.

Estas decisiones de la justicia no ayudan. Parece que premian a los criminales y a los asesinos diciendo que tiene derecho a estudiar y a seguir haciendo su vida. Mi hija también tenía derecho a seguir con su vida y tenía un montón de proyectos que él le quitó ese derecho” reflexionó Verónica.

Respecto a la distancia que se tomó desde el movimiento Ni Una Menos por las consignas y agenda que a cada año se fueron sumando, la mamá de Chiara pidió advertir lo fundamental de la lucha contra la violencia y los femicidios. “Lo fundamental es luchar contra la violencia no el color del pañuelo verde o celeste. El problema es del movimiento conmigo y no mío con el movimiento” concluyó.