El diputado provincial Néstor Loggio (Frente Creer-Concordia) sostuvo que el país atraviesa “una situación muy particular y la carne es un elemento sensible en la mesa de los argentinos”. Al respecto, expresó que hay cortes que rondan entre los 700 y 900 pesos el kilo, lo que hace que para muchas familias sea imposible comprar en carnicerías y supermercados. El legislador señaló que el presidente Alberto Fernández venía dialogando con entidades agropecuarias para encontrar una solución a la suba de precios pero al no encontrar una respuesta decidió tomar “una medida drástica que a nadie le gusta”.

“Necesitamos dólares para seguir creciendo pero no a costa de la inmensa mayoría de los argentinos”, remarcó el diputado entrerriano quien agregó que “si el precio del asado en los últimos siete meses aumentó el 70 por ciento no hay posibilidades de mejorar la situación de los argentinos”.

Loggio dijo que si la carne “sube por encima de la inflación, baja el consumo” pero lo llamativo es que no baja el precio en góndolas. “Acá hay que ordenar una situación que como dijo el presidente está desmadrada”, remarcó. Seguidamente, agregó: “El presidente está intentando ordenar todo esto y yo planteé mi poyo a esa postura, el presidente le va a encontrar una salida rápida”, consideró.