A San Martín de Tucumán las cosas no le están saliendo bien en la actual B Nacional, sobre todo cada vez que juega como local. Ayer, luego de la derrota frente a Independiente Rivadavia de Mendoza, hubo reproches para el equipo, para el árbitro del partido –Andrés Merlo- e incluso peleas entre los hinchas en la zona de la platea. Por eso, su presidente, Roberto Sagra, pidió que regrese la calma a la Ciudadela. “No estoy de acuerdo con algunos fallos del árbitro, pero tenemos que mirar hacia adentro. Estamos en un momento en el que el que se calienta pierde. Nos tenemos que unir y cerrar filas entre nosotros y concentrarnos más en el partido. San Martín requiere de pocos puntos para salir de un peligro de descenso. Hay desconcentraciones que las estamos pagando caras”, opinó el mandamás de la institución “santa”.