El partido de ayer en San Juan podría también devolvernos un título tipo “Messi 3 – Colombia 0”, porque Lionel fue al alma del triunfo argentino. Sin desmerecer las actuaciones individuales de algunos jugadores albicelestes, lo del mejor del mundo anoche en el estadio Bicentenario fue superlativo.

Más allá de algunos críticos –que saben criticar, pero muy poco saben de fútbol–, la Pulga demostró que es capaz de ganar un partido solo, y esto no es exagerado. Sin embargo, también es cierta que, esta vez, Bauza lo acompañó con lo mejor que tiene, acertando los tres cambios que realizó para enfrentar a los cafeteros.

Cuando corría muy poco tiempo desde el comienzo del partido, con un conjunto colombiano dirigido por el argentino Pekerman –que estuvo muy frío en todas sus líneas–, Lionel tomó la pelota en el borde del área rival, eludió a un jugador y le cometieron falta. Inmediatamente, con un exquisito tiro al ángulo, el 10 venció la resistencia de Ospina poniendo el 1 a 0. Sin dudas, esto agrandó a la Selección argentina. Y su capitán estaba inspirado, porque, a los 22 minutos del primer tiempo, hizo una gambeta por derecha que dejó desparramado al jugador de Boca Juniors Wilmar Barrios para, luego, tirar un centro preciso a la cabeza de Pratto, quien  con excelente reflejo cambió la dirección de la pelota y puso el 2 a 0.

Por su parte, una Colombia sin reacción nunca inquietó a Romero. Mientras tanto, Argentina reposó sobre los pies del número 1 del mundo, que hizo todas las delicias habidas y por haber, cargando de amarillas al equipo oponente.

Ya en el segundo tiempo, los dirigidos por Pekerman habían sentido el impacto y no sabían cómo reaccionar a terrible actuación de Messi. También corresponde destacar la invaluable presencia de Pratto, que se ganó el 9 titular, dando un merecido descanso para lo que se viene a Higuaín y Agüero; Banegas, que hizo un aceptable primer tiempo, aunque se equivocó  en algunos momentos al querer transportar tanto la pelota; y Mercado, quien definitivamente tiene que ser el 4 de la selección, desterrando a un Zabaleta que, si bien supo entregar todo a su Selección, ya ha pasado su etapa de gloria.

Volviendo al partido, los dirigidos por Bauza controlaron el resto del juego. Después de que Higuaín entrara en cancha por Pratto, que se fue ovacionado del Bicentenario, la albiceleste se paró para salir de contra y rematar el partido. Así  fue que, a los 38 minutos del complemento, una pared entre Messi y Enzo Pérez (el reemplazo de Banegas) que no prosperó fue el puntapié inicial para que la velocidad mental y física de la súper Pulga hicieran que el defensor quede en ridículo, robándole en balón y metiéndose al área para servirle el gol al Pipita, que se pasó de largo, pero más atrás llegaba con una tromba Di María parar marcar definitivo 3 a 0.

Lionel fue protagonista en las tres conquistas, primero abriendo el marcador y luego asistiendo a sus compañeros en los otros dos goles, además de dar una clase de fútbol que pocas veces olvidarán nuestras retinas.

Lo negativo es tal vez saber que seguimos dependiendo de Messi, pero se pudo ver que el entrenador empezó animarse a tomar decisiones serias para cambiar el rumbo. Con este resultado, Argentina quedó en el puesto sexto. Si hoy terminara el torneo, nuestra Selección jugaría un repechaje para estar en el Mundial de Rusia 2018. Pero el camino es largo y todavía hay 18 puntos en juego que se repartirán a partir de marzo de 2017.

Pablo Paez

Equipo Pelota Dividida