Los trabajadores de Emilio Luque viven un momento desesperante luego de que se anunció el quiebre de la empresa, que está a punto de cerrar sus puertas y dejar en la calle a 1.200 empleados. “La situación como se sabe es crítica. Ayer hubo un comunicado oficial de parte del dueño de la empresa en el área del supermercado, en donde nos comunicaban que la empresa no podía seguir por falta de fondos. No había disposición de dinero para pagar los sueldos que ya están vencidos y atrasados desde mayo. Lo peor de todo es la comunicación de que la empresa no puede reponer la mercadería, que ya hace más de una semana que no se abastecía. De esa manera, el dueño nos anunciaba que la empresa estaba quebrada, que no contaba con los fondos ni los recursos. Lo que aducen ellos es un embargo que le trabó a último momento la AFIP por una deuda que tenían de hace varios meses”, comentó Miguel Zelaya, vocero de los trabajadores de Emilio Luque.