Primero se nace biológicamente, pero luego se nace existencialmente cuando se descubre la propia voz.
En medio de un mundo que intenta hacernos invisibles, encontrar la propia es voz, es hacerse visible.
Javier Villalba nació biológicamente en Toay, La Pampa, el país de los montes, en 1975, pero nació existencialmente, se hizo visible, cuando descubrió su tahiel, su propio canto, cuando se reconoció en su propia voz.
La Madre de Javier Villalba lo parió dos veces, cuando ella murió, nuevamente lo nació, pero esta vez al mundo ranquel. Por eso, la primera palabra que Javier aprendió, en esta nueva vida, fue Ñuke
Javier Villalba, juglar ranquel de La Pampa, que al partir su madre, recupera su cultura, se acerca al balbuceo ancestral de su Tierra, aprende a traducir su mensaje
Javier Villalba, alcanzó su tahiel, su canto sagrado, su canto ranquel, aunque también Javier es hijo de la milonga de las bardas, de las huellas de los medanales
Locución: S. M. Tovarich
Idea y Guión: Pedro Patzer
Edición Artística: Fernando Salvatori
Producción: Fabiana Álvarez – Alejandro Carosella
Actor Invitado: Oscar Naya
Dirección Artística: Marcelo Simón
Etiquetas: Salamancas y caminos