Fortunato Mallimacci, director de la Encuesta Nacional sobre Creencias y Actitudes Religiosas en la Argentina del CONICET, afirmó que, según la segunda edición del sondeo, durante la última década disminuyó la cantidad de personas que se consideran católicas y aumentó las que participan de alguna iglesia evangélica o pentecostal.

"La religiosidad es una cosa muy profunda que no cambia porque haya un papa argentino", sostuvo Mallimacci, en diálogo con Mil Gracias. El sociólogo especializado en religiones destacó que casi el 60 por ciento de las personas que se consideran creyentes, práctica su culto "por cuenta propia", es decir de manera autónoma y por fuera de alguna institución. Además, advirtió que solo el 8 por ciento de los católicos frecuentan un sacerdote o templo.

El entrevistado advirtió las dificultades de una institución "dura" y "tradicional" como la Iglesia Católica para adaptarse esta realidad y consideró que la mayoría de las personas que se hacen evangélicas "es porque encuentran una pequeña comunidad que los acoje", según Mallimacci.