Juan Ignacio Galarza, 23 años, de Escobar, se quedó con el Future Argentina-10 disputado en el Complejo OSPACA de Villa del Dique, Córdoba, al derrotar en la final a Tomás Lipovsek Puches, con quien luego compartió el almuerzo, por 6-4 y 6-4.
“Mi papá, Oscar, es profesor de tenis. Desde chiquito tuve una raqueta en la mano. Y siempre me divertí. Pero nunca sentí la presión se su parte de tener que jugar al tenis”, dijo Galarza.
Aunque agregó que “a los 17 años me explotó la cabeza y dejé de jugar por casi medio año. A muchos nos pasa que a la hora de decidir entre abandonar y ser profesional se nos complica la cabeza. Hace poco le pasó a (Gerónimo) Espin que volvió ahora”.
Señaló que en esos meses recuperó tiempo con amigos, con la familia y evaluó que hacer de su vida. “Estaba saturado de la cabeza. Reflexione si esto de jugar al tenis me hacía feliz o no. Pero me di una nueva oportunidad y me va saliendo bien, es una vida difícil. Hay más momentos duros que de alegría. Es una vida muy solitaria. Pero me la banco”.
Galarza ganó su sexto future (el segundo del año). Está entre los 400 del mundo. Juan Ignacio estima que podría estar mejor en el ranking.
“Cuando salté a jugar Challengers me encontré con un mundo diferente. Más profesional. Con puntos que no se regalan como en los Futures. Son más ordenados. Eso parece una pavada, pero es clave. Son flacos con más experiencia y compiten al ciento por ciento. Creo que puedo jugar de igual a igual y es lo que quiero en 2018” cerró Galarza que cerrará su año en torneos en Mendoza, San Juan y Chile.