Tras los reiterados siniestros viales producto de los problemas de sueño de los conductores, el investigador de Conicet Santiago Plano explicó la importancia de estar bien descansado y se refirió a los estudios realizados en 2012 donde se detalla los ciclos de sueño de los choferes de micros de larga distancia. En Verano 2020, precisó que “el 15 por ciento de ellos presentaba somnolencia grave activa mientras manejaba” y señaló que “sin llegar a dormirse, les costaba mantenerse despiertos”.

En diálogo con Mariel Ríos, Plano sostuvo que “si bien los choferes dormían cerca de siete horas por día, esa cantidad estaba muy fraccionada a lo largo de todo el día, por lo que se trata de un sueño poco reparador”. Además, indicó que “el 30 por ciento de ellos tenía apneas de sueño” y “más del 80 por ciento tenía problemas metabólicos”.

En tanto, el investigador recomendó que “ante la primera señal de fatiga mientras se conduce un vehículo, hay que parar ya sea para dormir o tomar un café”.